La transformación digital en las empresas se expande y cobra fuerza en América Latina. Lo que comenzó con los mandatos de las administraciones tributarias de los distintos países, en un intento de tener un mayor control -básicamente para evitar la evasión de impuestos y aumentar la recaudación- fue el inicio de una tendencia que hoy está impactando no solo al área fiscal, sino a cada proceso de una compañía. De igual manera, la exigencia de sumarse a este onboarding digital está llegando a las empresas más pequeñas, que durante un tiempo estuvieron liberadas de la obligación de digitalizarse.
El desafío no es menor. Históricamente, las compañías han operado de manera manual, presencial, y confiando en el almacenamiento y los procesos en papel. Sin embargo, y con un impulso adicional a causa de la pandemia, la forma de hacer negocios está cambiando, y la necesidad de satisfacer las demandas de los gobiernos y de las distintas entidades que tienen que ver con el cumplimiento en cualquiera de sus aristas aumenta día a día.
La digitalización de los procesos requiere no solo de un cambio cultural que involucre a toda la organización, modificando la forma de operación en todos los niveles; también juega un rol fundamental contar con las herramientas tecnológicas que permitan dar ese salto sin afectar la forma en que cada compañía conduce su negocio.
La innovación, por otra parte, recae en empresas capaces de desarrollar soluciones tecnológicas, especializadas, pero capaces de adaptarse y transformarse en el vehículo que permite a cada compañía insertarse en esos procesos digitales de manera segura, gradual y con ello, cumplir con las crecientes demandas fiscales, legales e internas.
La transformación digital, como concepto, es impulsada por la innovación. El avance de las tecnologías es lo que ha ido permitiendo que hoy veamos al papel desaparecer y podamos prescindir con mayor frecuencia de trámites físicos; agilizar y hacer más eficientes los procesos, ahorrar recursos y dar más seguridad a las organizaciones, resguardando su información.
Por esta razón, al momento de evaluar un proveedor tecnológico para enfrentar eficientemente los desafíos que impone la transformación digital, es recomendable revisar la importancia que le atribuye a la mejora continua y a su capacidad de adaptación al cambio como parte del proceso de creación de sus soluciones.
En Sovos, la innovación es uno de los ejes centrales. Sus equipos de desarrollo en varios continentes, que han sumado su experiencia y expertise local a las soluciones enfocadas a las compañías Enterprise, otorgan a las empresas de la región -sin importar su industria o tamaño– soluciones que resuelven todos sus requerimientos para gestionar sus procesos digitales, ya sea en el ámbito tributario, o bien, de negocios, y que además están diseñadas para adaptarse a las normativas y requerimientos de cada país.
Para esto, las distintas áreas de Sovos ponen especial atención en entender cómo operan y qué demandan distintas industrias, para ofrecer alternativas que faciliten efectivamente el onboarding digital a distintas compañías en sus procesos específicos y ayudándoles a lograr sus objetivos.