Gerente técnico de cuentas (TAM)
Un gestor clave para llevar los servicios a otro nivel
La figura del Technical Account Manager o gerente técnico de cuentas (TAM), es un recurso que ofrece una línea de comunicación constante con los clientes, y que mantiene visibilidad completa de sus procesos de negocios para ayudar en la resolución de distintas problemáticas que surjan en el desarrollo de un proyecto.
Proactivo por definición, el TAM -servicio disponible para clientes de mayor tamaño, que tienen estructuras y una operativa más complejas- ofrece valor agregado al actuar como punto único de contacto y facilitador entre el cliente y las distintas áreas de Sovos, colaborando en la búsqueda de soluciones a incidencias que pudieran generar cuellos de botella en algún proceso. El TAM ayuda a detectar oportunamente las problemáticas internas en los procedimientos de la compañía y sugiere soluciones, mejoras y buenas prácticas.
Para ser efectivo, un TAM debe conocer el negocio, cultura, problemáticas, procesos internos y contrapartes de un cliente en profundidad.
Disponible en dos modalidades, el TAM dedicado trabaja con un cliente en específico unas 32 horas semanales en promedio, mientras que el tiempo que dedica un TAM compartido a una cuenta va entre 8 y 24 horas a la semana, dependiendo de lo acordado.
Los TAM establecen reuniones de coordinación y seguimiento semanales con los clientes, en las que se revisa el status de todos los proyectos que estos tengan en marcha. Esta conversación permanente entre ambas partes se traduce en mejores tiempos de respuesta ante requerimientos y en una relación más fluida y eficiente.
En la práctica, durante las reuniones semanales se revisa el estado de la cuenta a nivel operativo, analizando el estado de los proyectos y los casos abiertos pendientes de resolución por ambas partes. El TAM se comunica proactivamente con las distintas áreas y define dónde se necesita su intervención para solucionar incidencias.
Adicionalmente se acuerdan reuniones trimestrales, en las que se revisan las métricas de los meses anteriores y se evalúan aquellos puntos que requieren de modificaciones dentro de una estrategia de mejora continua.
El TAM también está al tanto de los cambios regulatorios en curso y advierte al cliente de sus posibles alcances, para que tome las medidas pertinentes si estos afectan su negocio; además sugiere capacitaciones y trainings, y comparte información sobre nuevos productos o versiones de un producto que puedan ayudar al cliente a mejorar su negocio.