Una de las tecnologías más innovadoras que ha incorporado el celular es la posibilidad de verificar la identidad de los usuarios mediante biometría. Hoy es posible realizar todo tipo de trámites desde nuestros dispositivos móviles, como pagar cuentas, comprar y vender productos y asistir a reuniones de trabajo a distancia, entre otras cosas; pero sin duda la verificación biométrica se lleva las palmas.
El reconocimiento facial, la huella dactilar y el reconocimiento de voz son las tendencias de biometría más utilizadas a diario en nuestros teléfonos a nivel mundial.
Estos métodos no solo sirven para desbloquear los aparatos; también se pueden utilizar para ingresar de forma segura a diferentes aplicaciones bancarias y billeteras digitales, o dar instrucciones por voz a Siri para que haga una llamada o configure una alarma.
Según un estudio de Gartner sobre Inteligencia Artificial, el 70% de las organizaciones utilizan estos métodos en sus trabajos y lo ejecutan por medio de aplicaciones para teléfonos inteligentes.
Pero… ¿por qué la biometría?
Al ser un método de reconocimiento basado en las características físicas propias de una persona, y gracias a la gran posibilidad de usos que tiene, la biometría se convierte en una “llave” única e irrepetible, que permite a los usuarios realizar trámites de manera fácil, accesible y segura, contribuyendo a la digitalización de diferentes procesos que antes requerían que el usuario acudiera a una sucursal.
Según un estudio de Americas Market Intelligence (AMI):
- 63% de las empresas utilizan el reconocimiento facial, verificación de identidad de una persona a través de una fotografía, video u otro elemento audiovisual, que se contrasta contra una base de datos que guarda registro de ciertas medidas del rostro de dicha persona.
- 43% de las compañías puso en marcha la huella digital, la que ha sido previamente enrolada en algún servicio para efectos de comparación con la obtenida en un huellero.
- 12% de las empresas cuenta con tecnologías de reconocimiento de voz. Por medio de una máquina o programa se identifica la persona gracias al análisis de su voz, que depende tanto de la conformación de su tracto vocal, como de factores de comportamiento.
Otras aplicaciones de la biometría
Respecto de las tendencias en lo que se refiere al uso de la biometría en el sistema financiero de Perú, por ejemplo, se deben usar al menos dos métodos de verificación de identidad -uno de ellos debe ser biométrico- para verificar que una persona es efectivamente quien dice ser.
Un reconocido banco en dicho país lanzó una cuenta con apertura 100% digital, un avance que permite que sus clientes no deban acudir a sus oficinas. Además, pueden retirar dinero sin tener la tarjeta física en su red de cajeros.
En Chile otra entidad bancaria ha desarrollado una aplicación para obtener la contraseña de coordenadas sin necesitad de una tarjeta física. El dispositivo permite utilizar la biometría facial y dactilar para gestionar los pagos sin importar dónde estés.
Los recintos hospitalarios requieren la huella dactilar para identificar el sistema de previsión de salud de un paciente. Al utilizar la biometría, los clientes pueden firmar legalmente documentos de cualquier índole de forma digital con la confianza de que el usuario ha sido verificado.
La verificación biométrica permite aumentar el grado de certeza al corroborar la identidad de una persona para procesos de firmas electrónicas u otros trámites, protegiendo a las compañías al reducir la tasa de fraudes por suplantación de identidad.